«Manderlay»

Manderlay (2005) / Director: Lars Von Trier / Guión: Lars Von Trier / Intérpretes: Bryce Dallas Howard, Isaach De Bankolé, Danny Glover, Willem Dafoe, Michael Abiteboul, Lauren Bacall.

Tras abandonar el infierno de Dogville, Grace, su padre y el ejército de gangsters que está a su servicio se topan, azarosamente, con una plantación sureña dejada de la mano de dios que resulta ser el residuo de una esclavitud ya abolida. Horrorizada por la sumisión de los negros, Grace, a pesar de la desaprobación de su odiado progenitor, decide quedarse para forzar un cambio social con la ayuda de algunos de los gangsters.

Manderlay es una película profundamente amarga y pesimista que nos habla sobre las consecuencias del intervencionismo a partir de la lacra del racismo. A raíz de la firme voluntad de Grace (Bryce Dallas Howard, espléndida) de liberar a los negros de su esclavitud en la plantación de Manderlay, se instaura un cambio total en esta pequeña comunidad, despojando del poder a los blancos y tratando de diseñar una «democracia» (que después revelará sus imperfecciones) siempre dirigida y controlada por ella misma, que dispone de cuatro matones como protección y un abogado encargado de legalizar la situación laboral, cedidos por su padre (Willem Dafoe).

Cuando uno ve Manderlay, es inevitable que le venga a la cabeza la situación de Irak y la política intervencionista/invasora de Estados Unidos. Desconozco cuál ha sido la intención de Von Trier, pero la película ostenta obvios paralelismos, de modo que parece ser una parábola o metáfora crítica sobre el extranjero que se inmiscuye en los asuntos ajenos sin conocer la auténtica voluntad de aquellos a quienes atañe la problemática. La protagonista trata de imponer su idea porque considera que es lo correcto, lo que se ha de hacer, pero lo lleva a cabo mediante el uso de la fuerza, sin consultar al pueblo, como si éste fuese el pájaro que liberó de su jaula y murió al haber sido criado en cautividad. La libertad que pretende instaurar es una forma de esclavitud dado que no permite la libre elección de un sistema y condena a los receptores a una vida en la que no creen.

El director danés reparte cera a diestro y siniestro, cuestionando tanto el totalitarismo inicial de la plantación como su progresión hacia una democracia que no es, en absoluto, sinónimo de armonía y que necesita de unos estrictos guardianes cuya permanente presencia amenazante impida la rebelión.

Más allá de las diversas interpretaciones sociopolíticas que pueda originar y su controvertido mensaje, lo cierto es que la película genera muchas lecturas antropológicas y, al igual que Dogville, reincide en su estudio de la condición humana para extraer nuestras miserias, tentaciones, contradicciones, ruindades, ética y moral… De hecho, puede que mi impresión esté equivocada, pero parece sugerir, yo creo, que el mayor enemigo del hombre no reside en el sistema que le rige, sino en sí mismo. Y es que la visión de Lars Von Trier es todo lo contrario a lo acomodado o a lo complaciente ya que vuelve a insistir en el retrato de unos personajes mayoritariamente hostiles y pecadores, tan víctimas como verdugos, con muchos demonios internos y sin posibilidad de salvación, que viven en comunidades aisladas y rechazan per se a los extranjeros que tratan de integrarse.

 

También, la nueva propuesta de Von Trier sirve para que la otrora angelical, incorrupta y pura Grace continúe su fase de aprendizaje y, por qué no decirlo, de oscurecimiento en su evolución. Para ella, Dogville y Manderlay han sido estaciones de paso causantes de dolor donde sus buenas intenciones han fracasado y hasta los personajes más afines han acabado traicionándola. Y aún queda por delante la tercera parte de la trilogía sobre USA, Wasington (sin h). Veremos qué nos tiene preparado el atrevido y transgresor autor danés…

Como en su anterior película, el escenario se reduce a la mínima expresión, el tono es eminentemente teatral y la narración se ve dividida en capítulos y apoyada por la voz en off de John Hurt. El guión resulta tan rico y los intérpretes cumplen tan bien que no es necesario más para atrapar la atención y conducirnos por los vericuetos de una historia siempre inquietante. Es, en definitiva, un cine desnudo, apoyado en el guión y los actores, y que sale victorioso del reto con buena nota.

Menos contundente, demoledora y novedosa que su predecesora, pero muy interesante.

Valoración (0 a 5): 4

9 pensamientos en “«Manderlay»

  1. Joder! Qué observador! XD

    Se me había pasado lo de la categoría 😛 . Respecto a la cabecera, la puedo cambiar porque mi plantilla me deja. Dependiendo de la plantilla que escojas, la puedes personalizar más o menos.

  2. Coincido con tu visión y con tu ‘nota’, de hecho, venía a decir prácticamente lo mismo, pero con otras palabras, cuando la comenté hace unos días en el último post del blog de SazMann, así que no me repito 😛

  3. Tengo a un comenarista enganchado a mi blog al que odio profundamente. ¿Qué me aconseja, doctor? Le aseguro que ya he probado todas las estrategias posibles no-violentas, pero no se va ni con lejía. Además, para mí que es masoca y le gusta.

  4. «Anonimize me», sé quién es usted. Tenga en cuenta que el blog me permite ver las IP’s de los intrépidos comentaristas. 8)

    Respetaré su anonimato, no tema. Mi consejo, en todo caso, es que banee a ese fulano si tanto le odia (sobre todo si sus iniciales son M.R. :D).

  5. Ya sé que sabe quién soy, le considero incapaz, pero no tanto…

    Y no sea tan egocéntrico, que se cree que todo va por usted 😛

    Me voy al cine, hala.

  6. Como es que tu antiguo blog ya no se puede ver? Pensaba que almenos lo mantendrías para conservar los artículos. Es una pena que se pierdan.

    Saludos

  7. Pues no sé qué coño ha pasado, Harry. Parece que 20six ahora pide una contraseña o no sé qué… De todas maneras, se pueden consultar cosas de mi anterior blog si utilizas el google y luego va a la página «en caché» del resultado de la búsqueda.
    Igual aprovecho para recuperar cosas antiguas y volverlas a postear aquí puliéndolas un poco…

  8. Pingback: sjhojyaoyw

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